13/03/2019 Condottiere

Haz sonar la orden de ataque

El temblor del suelo se extingue con la detención del ejército a los pies del campo de batalla. Las fuerzas de sus enemigos se despliegan frente a ellos, listos para la contienda. Un lento pero contundente toque de tambor hace eco entre las colinas cuando un ensordecedor cuerno marca la llamada a las armas y los mercenarios cargan hacia el enemigo. ¡La batalla ha comenzado!

Adéntrate en la batalla

En Condottiere las ciudades estado de Italia gozan de opulencia. Usa a los condotieros, los ambiciosos líderes de poderosos ejércitos de mercenarios, para entrar en batalla y afianzar tu influencia por todo el país. ¿Marcharás con valentía a la batalla? o ¿trazarás un plan para agotar a los ejércitos de tus adversarios?

Las cartas de mercenario forman la columna vertebral de tu ejército. Desde un soldado de infantería de fuerza 1, hasta el poderoso cañón de fuerza 10, los jugadores deben decidir con cuidado qué mercenarios incluir en la batalla. Con 58 mercenarios disponibles para contratar, cada jugador puede formar un ejército formidable.

Al comienzo de la partida cada jugador empezará con una mano de 10 cartas. La mano se compondrá de una posible mezcla de cartas de mercenario y de cartas especiales. El ejército más poderoso tomará control de la región disputada. Elige estratégicamente qué mercenarios enviar a la lucha. Claro que, desconocerás la posible fuerza de la mano de tu adversario. Puedes empezar jugando un sencillo 1, comprometiéndote a luchar, pero sin mostrar tu carta más fuerte. Deberás continuar jugando cartas para seguir en la batalla, pero puedes utilizar a tus mercenarios más débiles para intentar forzar a tu adversario a jugar sus cartas más poderosas.

Antes de que comience la batalla, el indicador de Batalla se colocará sobre una región vacía del mapa. Esta será la zona cuyo control se disputará en la batalla. Ganar la batalla te permite colocar un indicador de Control de tu color en el mapa. Si has colocado todos tus indicadores de Control, o bien si controlas tres regiones adyacentes, ganarás la partida.

Retírate y reúne tus fuerzas

Para ganar la guerra no es necesario ganar todas las batallas. Un buen general dirigirá su ejército con cuidado, y sabrá reconocer que una retirada a tiempo puede darle la ventaja necesaria en la siguiente contienda. Si tienes claro que no ganarás la lucha por una región determinada, puedes retirar estratégicamente a tus tropas y dejar que tus adversarios agoten sus ejércitos. Una vez una carta es jugada en el campo de batalla, se quedará ahí a menos que una carta especial la retire. Al final de la batalla, todas las cartas colocadas en el campo de batalla son descartadas.

Una vez la batalla se ha resuelto, los jugadores sin mercenarios en sus manos pueden decidir descartar el resto de su mano. Si todos los jugadores se han quedado sin cartas, se reinicia el mazo y se reparte una nueva mano a cada jugador de 10 cartas más 1 carta de bonificación por cada región bajo su control.

Gestiona tu mano con mucho cuidado Si juegas demasiadas cartas en tu primera batalla, tu influencia podría ser mínima en las batallas futuras hasta que se reinicie el mazo. Sin embargo, si eres demasiado conservador con tu mano en muchas batallas, podrías ser el último jugador con cartas y verte obligado a descartar todo lo que habías estado acumulando. Determina bien cuándo presionar en la batalla y cuando retirarte para reclamar estratégicamente las regiones de Italia.

Cambia el rumbo de la batalla

Ganar la batalla requiere de algo más que la fuerza bruta. El uso estratégico de las cartas especiales puede cambiar el rumbo a tu favor. Hay 8 cartas especiales, cada una con su propia habilidad. Se han añadido iconos intuitivos en la parte inferior de las cartas para ayudar a recordar su efecto.

Cuando juegues el Obispo, se descartará el mercenario de mayor valor de entre todas las filas de los jugadores. También podrás colocar el indicador de Favor en el mapa, evitando que pueda iniciarse una futura batalla en la región elegida. Cuando juegues al Espantapájaros, podrás devolver a tu mano uno de los mercenarios de tu fila. El Traidor finalizará la batalla de inmediato, permitiendo al jugador con el ejército más fuerte reclamar la victoria en ese momento. El Tambor infundirá valor a tus mercenarios, duplicando su fuerza en la batalla. El jugador con más Espías cogerá el indicador de Batalla y elegirá la siguiente región a disputar. La Heroína saltará a la batalla sumando 10 a tu fuerza de ejército. Debido a que no es una mercenaria, no será objetivo de los efectos de las cartas de Obispo, Tambor, Invierno ni Primavera. El Invierno y la Primavera afectarán al campo y por lo tanto a todos los jugadores. Mientras esté en juego, el Invierno hará que el valor de cada mercenario sea 1. Mientras esté en juego, la Primavera hará que el mercenario con el valor más alto sume una bonificación de 3.

La carta de Primavera afecta a las filas de todos los jugadores. El mercenario de mayor valor en ambas filas es el 6. El 6 suma una bonificación de 3, dando al jugador una fuerza total de 16. A pesar de que la Heroína es la carta con el número más alto, no es una mercenaria y por lo tanto no se ve afectada por la carta de Primavera. La Heroína hace que la fuerza del ejército de ese jugador sea 18, encabezándole en la lucha incluso sin la bonificación de la Primavera.

¿Te sientes capaz de afianzar tu influencia sobre Italia? ¡Prepárate para la batalla con Condottiere!

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